Después de buscar durante dos años, al tercero fue la vencida, y encontramos esta pequeña orquídea tan escasa en la península ibérica. Sólo se conocen tres poblaciones pirenaicas y una en el sistema ibérico, apareciendo en la hojarasca de hayedos y hayedo-abetales muy umbrosos. Es tremendamente difícil de localizar, tiene un color blanquecino, sin clorofila, a penas sobresale a veces de la hojarasca y no florece todos los años; es por esto que se le llama Orquídea fantasma.
Orquídea fantasma (Epipogium aphyllum)
Orquídea fantasma (Epipogium aphyllum)
Orquídea fantasma (Epipogium aphyllum)
Orquídea fantasma (Epipogium aphyllum)
Nido de pájaro (Neottia nidus-avis)
Nido de pájaro (Neottia nidus-avis)
Para rematar, en un humedal cercano, la Epipactis palustris.
Epipactis palustris
Epipactis palustris
Epipactis palustris
Al día siguiente subimos a Añelarra y pudimos disfrutar de una explosión tremenda de flora alpina, entre ellas algunos endemismos pirenaico occidentales como el Lithospermum gastonii o el Lathyrus vivantii.
Lithospermum gastonii
Lathyrus vivantii
Estrella negra (Nigritella gabasiana)
Primula elatior subsp. intricata
Dryas octopetala y Oxytropis foucaudii
Horminum pyrenaicum y Silene acaulis
Lonicera pyrenaica
Rododendro (Rhododendron ferrugineum)
Rododendro (Rhododendron ferrugineum)
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